En aquellos tiempos remotos,
cuando todos iban en moto,
llegó un caballero andante
a una iglesia protestante.
El cura dijo: ¡Orad!
El caballero entendió: ¡Cagad!
Bajándose los pantalones
hasta las rodillas
llenó de mierda
hasta la capilla.
El cura dijo: ¡este
hombre esta loco!
El caballero entendió:
¡este hombre caga poco!
Bajándose los patanlones
hasta los tobillos,
llenó de mierda
hasta a los monaguillos.
Moraleja: el que sabía nadar nadaba, el que no.....mierda tragaba
miércoles, 10 de junio de 2009
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2 comentarios:
Buenísima, joer.
Se me ha puesto la piel de gallina de lo buena que es XD
Hacía tiempo que no la leía, jajaj
:)
jajaja, esta poesía es ya conocida en distintas versiones por muchos pero sigue siendo graciosa en todas ellas. buen bloJ
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